Pasa la vieja de paso torpe,
la de oscuros estampados
y abanico de colores,
¡Mira la vieja! -los niños corren-,
para la vieja de ojos sin alma,
que sin ternura siempre les trata
teme caerse, prudencia vana
viene la muerte ,cabeza gacha,
mueve que mueve, ¡qué extraña gracia!,
abanico de colores y unas enaguas.
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